Los drones en la topografía se ha convertido en una de las mejores herramientas para los ingenieros dedicados a la construcción.
Con los drones se han conseguido que la fotogrametría sea más asequible, ahora puedes decidir invertir en un instrumento como estos y ahorrar mucho tiempo y dinero, en cuanto se refiere a levantamientos de terrenos, edificios u ordenamiento territorial.
Los drones de topografía generan ortomosaicos de alta resolución y detallados modelos 3D de zonas en las que solo se cuenta con datos de baja calidad, desactualizados o incluso inexistentes.
Al recopilar datos geoespaciales con un dron, es hasta cinco veces más rápido que con métodos situados en tierra, y requiere menos mano de obra.
Por lo tanto, permiten que los mapas catastrales puedan ser producidos de manera rápida y fácil, incluso en entornos complejos o de difícil acceso. Los topógrafos además pueden extraer características de las imágenes tales como letreros, bordillos, señalización vial, hidrantes y desagües.
Después con un software de fotogrametría, estas mismas imágenes pueden producir modelos de elevación muy detallados, líneas de contorno y líneas de ruptura, así como una reconstrucción 3D de los terrenos o edificaciones.
Las imágenes aéreas tomadas por los drones suelen acelerar y simplificar los levantamientos topográficos para el ordenamiento y planificación territorial.
Esto puede decirse de la inspección de la zona, planificación y diseño de la parcela, así como la construcción final de carreteras, edificaciones y servicios públicos.
Estas imágenes además proporcionan las bases para modelos topográficos detallados en el sitio, que pueden utilizarse para estudios previos a la construcción o de ingeniería.
Los datos generados también pueden ser transferidos a cualquier software BIM (modelado de información de construcción) o CAD (diseño asistido por computadora), para que los ingenieros puedan empezar a trabajar de inmediato, a partir de un modelo 3D.