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La Torre Eiffel es un monumento representativo de Francia que por la noche es quien da luz y vida a Paris y por lo tanto a Francia.
También, cada año millones de visitantes van observar esta maravilla del mundo.
Pero muy pocos conocen los secretos que guarda en especial, el misterio que hace que la torre se mantenga aun tan resistente. Por eso te contaré lo que encontré hace poco…
Torre Eiffel
El monumento hecho por 18.038 piezas de hierro forjado que alcanza los 300 metros de altura y diseñado por el ingeniero francés Gustavo Eiffel, de allí proviene el nombre de la torre.
Para los años de 1889 la torre poseía una antena en su cúspide que favorecía las comunicaciones entre distintos sectores del ejército francés, lo que derivó a la victoria en la batalla de Marne ante Alemania.
Otro punto que no se conce es que Eiffel construyó en lo más alto de la torre una habitación para él poder estar solo sin el ruido de la ciudad.
En sus inicios, la torre era de color amarillo, con el tiempo el color cambió a gris metalizado y, actualmente, cada cinco años se realiza una votación para que se elija el color que el monumento poseerá a futuro.
Más de 500 personas trabajan para el bien de la dama de hierro, ya sea por su mantenimiento o en la atención del restaurant de la torre, pero otras no muestran sus rostros ya que trabajan en la sala de máquinas, ubicada en el primer piso, desde donde se manejan manualmente los ascensores de la Torre Eiffel.
“Campos de Marte” bajo la Torre Eiffel
Debajo de las cuatro patas que le dan sostén a la gigantesca torre, existen salas subterráneas con enormes motores hidráulicos que manejan otros ascensores, junto a tanques de agua que hacen contrapeso para poder subir a todos los visitantes diarios.
Ambos salones fueron construidos bajo la sala técnica también denominada “Campos de Marte” durante la Segunda Guerra Mundial.
Incluso el mantenimiento de los 360 reflectores que hacen que la Torre Eiffel ilumine de noche a París y al río Sena, es complicado, ya que los técnicos especialistas se suben con equipos de montañismo para reparar cada uno de los focos averiados.
Las visitas a la torre se pueden realizar de manera particular sin un guía que vaya con nosotros a cada paso que avancemos en el recorrido de esta magnífica estructura, pero si se desea conocer el interior de las salas de control, se debe realizar con un guía una visita que hasta hace 5 años no se podía realizar.
